Hola.
Hay un concepto físico que aplica muy bien a tu vida profesional.
El concepto de inercia:
Un cuerpo en movimiento requiere menos energía para continuar en movimiento, mientras que un cuerpo que se detiene requiere más energía para volver a moverse.
Cuando me preguntan cómo hago para tener un trabajo en una empresa y al mismo tiempo continuar con mis proyectos les respondo que todo es cuestión de inercia.
No es que no pare nunca, pero no paso semanas o meses sin avanzar en mis proyectos, que es justamente el error que veo en otros.
Parar tanto tiempo y luego querer empezar de nuevo cuesta mucho trabajo.
Y esto aplica para muchos temas laborales…
Soy un creyente de la capacitación constante, pero cuando toco el tema mucha gente me dice que se queda sin tiempo para capacitarse.
¿Sabes qué es lo más difícil de la capacitación?
Tomar un curso y dejar pasar meses antes de tomar otro, porque empiezas de cero nuevamente, lo que requiere más energía, más concentración y, por lo tanto, da más flojera.
Y lo más importante, un profesionista que no se capacita constantemente corre el riesgo de quedarse obsoleto, y cuando esto ocurre va a perder su trabajo. He visto esta situación en varias ocasiones: un día a la vez no se nota que un profesionista se va quedando obsoleto, pero conforme los días se acumulan en meses y años va siendo evidente que ya no aporta valor a su empresa.
Alguien a quien le sucedió esto me dijo:
«No me di cuenta en qué momento perdí el tren y dejé que otros me superaran».
Pues claro, esto no es visible de un día para otro, por eso muchos profesionistas no se preocupan, hasta que es demasiado tarde.
En mi caso llevo años capacitándome día tras día (ya 14 años para ser exactos), porque hoy en día hay tantas formas de capacitarte, a muy bajo costo, que no hay excusa.
Si no quieres pagar una mensualidad a una plataforma tipo Coursera puedes buscar videos en YouTube de temas relevantes para ti; yo hago esto, aunque solo con temas muy específicos, porque el video requiere toda mi atención y no siempre es posible.
El texto es un formato que no deberías dejar de lado, aunque entiendo que también debes tener plena concentración para entender lo que lees.
En caso de que el video o el texto no sea lo tuyo, te recomiendo escuchar podcasts, porque el audio es el formato más amigable para quien quiera mantener un ritmo de aprendizaje continuo.
Puedes escuchar podcasts mientras haces otras cosas. Yo por ejemplo los escucho cuando: salgo a caminar o en bicicleta, me baño, lavo los trastes, manejo o realizo actividades repetitivas o administrativas en la compu (de bajo requerimiento de atención).
Y vamos, te lo digo yo, que trabajo en el departamento de marketing de una empresa sin tener estudios formales en la materia.
¿Cómo lo logré?
Podría decir que ya tengo varias maestrías gracias a los podcasts, una de ellas en marketing, que es justo el tema sobre el que más tiempo llevo escuchando a expertos.
Así que ya sabes, que la obsolescencia te haga los mandados.
-Hasta la próxima.
Suscríbete a la newsletter
Cada miércoles una reflexión para tu mejora